Es la receta del programa presentado ante el Senado italiano por Mario Monti.
Antes de pedir el voto de confianza de los senadores, el nuevo primer ministro ha destacado que Italia necesita volver a crecer económicamente para recuperar su credibilidad.
“El futuro del euro depende también de lo que Italia haga en las próximas semanas. Pero no solo depende de eso. Los inversores internacionales poseen casi la mitad de nuestra deuda pública. Tenemos que convencerlos de que estamos tomando las medidas necesarias para lograr una reducción gradual de la relación deuda-PIB. Los sacrificios necesarios para estimular el crecimiento y reducir la deuda tienen que ser compartidos. Cuanto más justas sean las medidas más fácilmente serán aceptadas”, declaraba.
Para poder poner en marcha su programa, este viernes Monti pedirá también el respaldo de la Cámara de los Diputados, donde goza del respaldo de las fuerzas parlamentarias.
En las calles, sin embargo, se multiplican las protestas. Esta mañana miles de estudiantes se han manifestado en diferentes ciudades del país en contra de lo que califican de “gobierno de los bancos”.