La Unión Europea ha seguido la recomendación de la Eurocámara y ha aprovechado la cumbre en Bruselas con Rusia para expresar al presidente ruso Dmitri Medvédev su preocupación por las irregularidades detectadas en las elecciones parlamentarias celebradas hace una decena de días y que dieron la victoria a Rusia Unida, el partido presidencialista y del primer ministro, Vladímir Putin.
En palabras del presidente del Consejo Europeo, Herman van Rompuy: “Nos preocupan las irregularidades y la falta de imparcialidad que han denunciado tanto los observadores como algunas facciones de la sociedad rusa. Nos preocupan los arrestos de manifestantes”.
Declaraciones que siguen a la reclamación del Parlamento Europeo, en una resolución no vinculante, de que se anules los resultados y se celebren nuevos comicios, esta vez limpias.
“No tengo nada que decir, porque se trata de nuestras elecciones”, respondía el mandatario ruso. “Al Parlamento Europeo nadie le ha preguntado nada, puede decir lo que quiera, pero yo no voy hacer ningún comentario al respecto, sus declaraciones no significan nada para mí.
En nuestro parlamento, en Rusia, tanto la mayoría como la oposición mostraron ayer un duro desacuerdo con la posición del Parlamento Europeo. El Parlamento Europeo tendría que preocuparse por los asuntos europeos, si mira un poco alrededor verá cuántos problemas tiene. Mi posición sigue siendo la misma” comentaba el presidente ruso.
La inquietud de la Unión por cómo se ha desarrollado el reciente proceso electoral podría servir, en todo caso, a que en las presidenciales de marzo no se repitan el mismo tipo de irregularidades corroboradas por los observadores internacionales.
“Dmitri Medvedev tuvo que mirar a los ojos a los líderes europeos, los mismos que hace algún tiempo querían creer su retórica liberal. Pero ahora se han dado cuenta de que Rusia no es más democrática que antes. Y es que el presidente ni siquiera está pendiente de ser reelegido. En cuanto a la próxima cumbre, quizá sea más importante, porque Rusia estará probablemente representada por Vladimir Putin” explica el corresponsal de euronews en Bruselas Andrei Beketov.